Dra. Eva Vilarrasa, dermatóloga
Soy la Dra. Eva Vilarrasa, especialista en dermatología médico-quirúrgica.
“Doctora tengo la piel muy reseca”
“Doctora cuando me miro las piernas las veo cuarteadas, como escamas”
“Doctora ¿por qué cuando me quito las medias me saltan trocitos blancos?”
“Doctora, después del verano que hago para tener una piel más sana?
Estas son algunas de las preguntas más frecuentes que tienen mis pacientes a diario, ya que la piel reseca es una de las preocupaciones más habituales a partir de los 30 años. Tener la piel seca es consecuencia de la pérdida de hidratación y elasticidad que es un proceso normal a medida que nuestra piel va envejeciendo. Ésta se produce sobre todo en zonas más descuidadas como brazos, codos, rodillas o talones. Por este motivo la hidratación diaria en todo el cuerpo es fundamental para garantizar que nuestra piel está protegida de agentes externos y con aspecto saludable.
Ahora bien, ¿es suficiente? ¡Muchas veces no!
Y no es suficiente porque, aunque la piel se va renovando cada 28 días y el cuerpo tiene la capacidad de restaurar las células muertas por nuevas, a medida que van pasando los años esta renovación natural de la piel es cada vez más lenta. Lo que significa que la sequedad va aumentando. Entonces, ¿cómo podemos ayudar a la piel a restaurar más fácil y rápidamente estas células sobrantes? Pues realizando de forma periódica una exfoliación sobre la piel.
Para realizar una correcta exfoliación de la piel lo ideal es realizarla una vez a la semana. De esta forma nos aseguramos que al renovar la piel asiduamente, la posterior aplicación de otros productos hidratantes aumentan su eficacia.
Después de una exfoliación facial, ¿debo aplicarme otro producto?
La correcta forma de realizar una exfoliación en la piel del cuerpo, es mediante productos específicos que contengan partículas exfoliantes. Se debe aplicar por encima de la piel seca en la cantidad idónea para exfoliar todo el cuerpo. Realizando masaje de abajo a arriba para ayudar a la circulación sanguínea y mejorar la circulación.
Una vez que el producto está aplicado por todo el cuerpo, lo debemos retirar con agua idealmente fría. Además, recomiendo realizar durante la retirada del producto, un masaje con un guante de crin. Este potencia el efecto de la exfoliación, liberando todavía más las células sobrantes y abriendo los poros para su renovación.
Una vez retirado el producto de forma definitiva, debemos secar la piel con una toalla de algodón. Una vez comprobamos que la piel está seca, debemos aprovechar para ponernos nuestra crema hidratante habitual. Tal y como hemos comentado anteriormente, al exfoliar la piel la dermis está mucho más preparada para recibir cualquier producto en nuestra piel, por lo tanto al aplicar nuestra hidratante habitual, fomentamos que el producto penetre más internamente aumentando su eficacia
¿Cada cuando me tengo que exfoliar la piel?
Evidentemente, todas estas recomendaciones son generales, pero su frecuencia e intensidad deben adecuarse al tipo de piel de cada individuo. Los pacientes con patologías cutáneas previas deben consultar a su dermatólogo antes de realizar cualquier procedimiento exfoliante / un procedimiento exfoliante intensivo.
“Para una correcta y eficaz exfoliación de la piel del cuerpo, recomiendo el Body Scrubmas de Masderm, expertos en radiofrecuencia en casa. Tiene un 85% de ingredientes naturales como el aceite de aguacate, el aceite de almendras o el aceite de macadamia, que tienen unas excelentes propiedades antioxidantes y regeneradoras de la piel. Además su aroma es muy agradable”.